Sigue leyendo para saber cómo se forman las olas que luego surfeamos
Gracias a un fenómeno natural tan bello como las olas, deportes como el surf y similares existen como tales. Bien es cierto que se puede practicar ciertos deportes acuáticos gracias al viento, pero el oleaje nos proporciona ese saliente natural que nos ofrece el mar para poder realizar auténticas obras de arte en forma de maniobras encima de la tabla recorriendo una ola.
Por ello, vamos a dar alguna pincelada para entender uno de los sucesos más comunes en las playas: las olas.
¿Cómo se forman las olas?
Hay varios factores que influyen en la creación de las olas: el viento, el fondo marino y la propia velocidad que puede alcanzar la ola en función de la distancia recorrida.
El viento
El viento es el actor principal de la creación de la ola. En el mar abierto, las rachas de viento generan pequeñas olas en la mar en calma que, si comienzan a seguir un ritmo constante, fijo y sin obstáculos hacia la orilla, acabará rompiendo al final gracias a que el nivel de la tierra del fondo marino ira subiendo hasta ser orilla, creando así un obstáculo para la ola. La forma de dicho fondo marino, también conforma distintos tipos de olas que explicaremos a continuación.
El fondo marino
Cuando la ola comienza a tocar tierra desde más cerca de la cresta, se da el fenómeno donde la ola rompe, ya que la parte de debajo de la ola va perdiendo velocidad por el roce con la tierra, mientras que la parte superior sigue con su velocidad y fuerza original, propiciando así la ola, que variará en su tamaño en función de la distancia que haya recorrido y la velocidad que haya adquirido.
El tipo de fondo marino también nos puede informar del tipo de ola que rompe en el spot donde nos encontremos. En las playas de arena, los fondos marinos no cambian con brusquedad, por lo que la formación de olas será mas suave (y estos spots los más recomendados para practicar surf). En cambio, en las playas con grandes cambios en el fondo marino, de arena o de roca, se dan cambios bruscos en el movimiento de la ola, por lo que las olas suelen romper con brusquedad (como en las rocas inferiores de un acantilado).
Por ello, sabiendo todo esto, podemos entender mejor el mar, su comportamiento y conocer mejor cómo se crean esas olas que luego surfeamos. Un fenómeno tan efímero en su llegada, pero tan paciente en su creación, nos permite poder practicar un gran deporte como es el surf.
Fuente: SurfMoción